domingo, 22 de enero de 2012

Gangs of New York (2002)

Cómo despilfarrar 97.000.000 de dólares sin necesidad de consumir drogas 

Lo peor de que uno se afane contínua y exclusivamente en firmar clásicos y humedecer a los críticos, al público y a seres de otras galaxias, es que se corre el riesgo de terminar firmando una mierda olímpica de presupuesto e infantiles pretensiones superlativas como Gangs of New York.

Ya al comienzo del film siento en la garganta ese algo indefinible que intento ignorar y que finalmente, después de un buen minutaje, consigo escupir sobre mi mano. Es una idea incómoda. Leo su contenido: "Detrás de tanto decorado, extras, malabarismos, planos generales épicos y sentencias con ínfulas de máxima, todo en esta película es un paraje yermo y estéril".

Resulta casi obsceno constatar secuencia tras secuencia el despilfarro de dólares que perpetra Scorsese para a la postre reducir el film a un infantil argumento de telenovela, en el que se dan cita un romance bobo, una venganza boba y mil y una pinceladas de patriotismo, honor, justicia celestial, rúbricas por doquier en los libros de historia y todo ese aburrido y manoseado utillaje al que nos tiene acostumbrados el cine yanki de mala calidad. Cosas como "Mi padre murió luchando por su país" y toda esa basura panfletera.

Por mucho que lo haya intentado, por mucho que lo siga intentando, Martin Scorsese nunca logrará ser más que el mediocrucho director que en realidad siempre fue, y que tiene, eso sí, buen ojo para los castings y las relaciones públicas. Si Robert de Niro salvó con su talento algunas de las obras del realizador, Day-Lewis se gana aquí también el sueldo con un trabajo más que respetable, a pesar de que su competencia se vea tan contrastada con el vacío argumental y el frívolo estilo narrativo de esta cinta grandilocuente y falaz.

Por otro lado, Di Caprio. Quede dicho que le considero un actor de primera, pero en demasiadas ocasiones ejecuta roles que no le sientan bien y Gangs of New York es una de ellas.

En fin... una pena.

No hay comentarios: